Cómo generar buenos hábitos.

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Berlitz

Los hábitos no son más que pequeñas acciones que construyen algo a futuro. Pueden ser buenos o malos dependiendo de tus objetivos. ¿Qué es un hábito? Según el diccionario, un hábito es una práctica habitual de alguna acción. Puede ser comer un postre después del almuerzo o puede ser tomar dos litros de agua al día. Lo que realmente genera los hábitos es la sensación que sientes a partir de ellos, los que ya tenemos generalmente nacen de ciertas necesidades básicas, por ejemplo: comer a ciertas horas porque tu organismo ya se ha acostumbrado a trabajar de una forma específica. Es por la sensación que tenemos al final, (o lo que nos hace sentir) que tendemos a construir la rutina. Es por ello que para generar un nuevo hábito que queramos implementar en nuestra vida es necesario comenzar por entender el propósito que tiene, esto para poder entender qué deseo u objetivo tenemos que cultivar. 

Ya teniendo esto definido podemos empezar por entender cómo condicionarse a nosotros mismos para implementar un hábito que perdure en el tiempo y no que comencemos de forma abrupta y dejemos a la semana de comenzar, porque si hacemos cambios demasiados drásticos nos podemos desmotivar. Aquí van 3 consejos que pueden ayudarte a construir nuevos hábitos. 

  1. Comienza pequeño. 

Si lo que quieres es hacer ejercicio a diario porque quieres perder demasiado peso o tener el cuerpo de un atleta, no es recomendable que comiences haciendo ejercicio tres horas al día. Mejor comienza con ponerte la ropa del gimnasio a una hora específica. Así no verás el objetivo como algo muy inalcanzable, lo vas a romper en pequeños objetivos que si vas a poder cumplir, como ponerte la ropa adecuada.

2. Combina el placer instantáneo con el nuevo hábito.

Si quieres comer más saludable y empezar a cocinar tu comida a diario, pero odias cocinar, el hábito se va a convertir en algo poco realista para tu carácter, lo que generará frustración y hará que lo dejes muy rápidamente. Lo que puedes hacer es combinar algo que sí disfrutas y que te genera un placer instantáneo como: escuchar ese género de música que te encanta, únicamente cuando vas a cocinar, así conviertes algo tedioso en una actividad agradable.

3. Hazte un recordatorio diario de tus objetivos. 

Esta es un poco dura, pero funciona para la motivación. Puedes generar una forma creativa de recordarte por qué lo estás haciendo. Si es ahorrar dinero pon una foto de ese auto que tanto quieres en la pared frente a tu cama, si lo que quieres es leer un libro, ponte una alarma que te recuerde lo bien que te vas a asentir cuando sepas qué sucedió al final. Hay muchas herramientas divertidas que puedes utilizar para incrementar tu motivación.

Esperamos que estos consejos te hayan servido para que puedas cumplir tus objetivos. Y que disfrutes el proceso de llegar a ser la mejor versión de ti mism@.