
Chile y Estados Unidos: historia e impactos culturales
Author:
Andrea Capetillo
Puede que no siempre lo notemos, pero la relación entre Estados Unidos y América Latina ha dejado huella en casi todo: desde decisiones políticas hasta lo que estudiamos, como el inglés, o adónde emigramos. Países como México, Colombia o Chile han sentido este vínculo en su historia, su economía y su día a día.
Entender cómo se formó esta conexión y por qué sigue siendo tan fuerte nos ayuda a ver con otros ojos los retos, y también las oportunidades, que vivimos hoy. No todo ha sido fácil: ha habido acuerdos, pero también tensiones.
Sigue leyendo para conocer más sobre la historia entre Chile y Estados Unidos.
¿Cuál es la historia de la relación de Estados Unidos con el resto del continente?
Bueno, esta historia viene de lejos, más de dos siglos atrás. Es una relación con altibajos: momentos de tensión, otros de cooperación, y muchas decisiones que han dejado huella en toda la región.
¿Dónde empezó todo?
En 1823, cuando Estados Unidos lanzó la famosa Doctrina Monroe. ¿La idea? Dejar claro que América era “cosa de americanos”, y que no querían a los europeos metiéndose en los asuntos del continente.
Ese fue el primer paso para posicionarse como un actor clave en los asuntos del continente.
¿Qué pasó durante el siglo XX?
La influencia de Estados Unidos aumentó, especialmente durante la Guerra Fría.
Con la excusa de frenar el comunismo, Estados Unidos se metió en los asuntos de varios países.
Y, claro, esas intervenciones no fueron gratis: dejaron huella. Aún hoy, muchas de sus consecuencias se siguen viviendo.
¿Todo ha sido tensión?
No. También hay capítulos positivos:
Intercambio comercial y educativo: programas binacionales, acuerdos económicos, becas, etc.
Cultura compartida: películas, música, deportes, celebraciones. Hay un cruce constante de ideas y tradiciones.
La relación con México es más cercana por la proximidad geográfica y los lazos históricos.
¿Y ahora?
Hoy los retos son compartidos:
Migración.
Cambio climático.
Seguridad.
Desarrollo económico.
¿Cómo afecta Estados Unidos a los países latinoamericanos?
La influencia de Estados Unidos está en los productos que compramos, lo que vemos en redes sociales, series de televisión o en las noticias. Y claro, también en lo político y lo económico. Las decisiones que se toman allá arriba afectan directamente a países como México, Colombia, Guatemala o Honduras.
Comercio
México envía cerca del 83 % de sus exportaciones a EE. UU., lo que lo convierte en su principal socio comercial. Esto genera una dependencia económica que puede ser riesgosa. Cambios en aranceles o tratados afectan de inmediato a toda la región.
Migración y remesas
Las decisiones migratorias en Estados Unidos no se quedan en un papel. Cambian vidas, así de simple. Hay familias enteras que dependen del dinero que les mandan sus seres queridos desde allá. En lugares como Guatemala o Honduras, esas remesas no son un extra: son lo que ayuda a sobrevivir cada mes.
Seguridad
Estados Unidos ha estado metido en planes para frenar el narcotráfico, sobre todo en lugares como México y Colombia. La intención, claro, es mejorar la seguridad, pero no todos están de acuerdo. Hay quienes se preguntan si tanta presencia militar ayuda o si, en el fondo, termina complicando más las cosas para la gente que vive ahí.
Una región en disputa
En años recientes, China empezó a tener más presencia en América Latina. Eso ha hecho que varios países piensen dos veces antes de depender solo de EE. UU. La presencia de Estados Unidos en América Latina es fuerte y compleja. Su impacto se ve en la economía, la migración, la seguridad y la diplomacia. Entender este contexto es clave para imaginar un futuro más justo y equilibrado para la región.
Chile y Estados Unidos
La relación entre Chile y Estados Unidos tiene muchas capas. El comercio, la política y la energía son solo algunos de los temas clave. Chile, por ejemplo, es uno de los principales proveedores de cobre refinado para EE. UU. De hecho, casi el 11 % del cobre que importa ese país viene de allá.
Pero en 2025, las cosas se pusieron tensas. El gobierno estadounidense impuso un arancel del 50 % al cobre chileno. La noticia generó preocupación en Santiago, sobre todo por el impacto que puede tener en el comercio entre ambos países. Ahora están en pláticas para ver cómo reducir los efectos económicos de esa decisión.
Más allá de lo comercial, también hay trabajo conjunto en temas como energía renovable, democracia y derechos humanos. Chile ha avanzado bastante en proyectos de energía limpia, y parte de esa cooperación busca enfrentar el cambio climático con soluciones compartidas.
Claro, no todo depende de EE. UU. Chile también está mirando a otros lados, especialmente frente al avance de China en la región. Existe buena voluntad entre ambos países, pero también hay retos. Y el diálogo parece ser la mejor salida para seguir construyendo una relación más equilibrada.

Sigue aprendiendo
Entender cómo estamos conectados no es solo para los expertos. Nos ayuda a entender mejor lo que pasa a nuestro alrededor y a tomar decisiones con más sentido, porque detrás de cada política o frontera, hay gente con historias que se cruzan.
La relación entre Chile y Estados Unidos no es algo nuevo. Es algo que ha estado ahí, aunque a veces no lo notemos. Hablamos de comercio, migración, seguridad y cultura. Todo eso afecta a millones de personas, especialmente en países como México, Colombia o Chile.
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Preguntas frecuentes
¿Cuál es la relación de Estados Unidos con Latinoamérica?
Hay muchas cosas que los unen: el comercio, la migración, la seguridad. Todo eso los mantiene conectados, a veces para bien, otras no tanto.
Países como México, Colombia o Chile lo viven a diario. Ya sea por decisiones políticas, por acuerdos comerciales o por los flujos migratorios, lo que pasa en Estados Unidos muchas veces termina afectando a toda la región.
¿Por qué aprender inglés es importante para los latinos?
Aprender inglés te abre puertas. No solo para conseguir un mejor trabajo, sino también para estudiar en el extranjero o entender mejor el mundo que te rodea. Y claro, si eres latino, esto tiene aún más sentido. ¿Por qué? Porque en muchos casos, hablar inglés te hace la vida más fácil:
- Puedes adaptarte más rápido si decides mudarte a otro país.
- Es más sencillo comunicarte en ambientes nuevos, sobre todo en lugares como Estados Unidos.
- Y sí, también te da acceso a mejores oportunidades, tanto personales como profesionales.